Sin embargo, existe una relación directa entre el crecimiento económico y la demanda de combustible. La AIE explicó que, en el peor escenario debido al brote epidémico, la demanda por el crudo podría caer, en un solo día, en 730 mil barriles. Eso podría pasar en los países en los que el precio de la gasolina se mueve libremente de acuerdo con la oferta y la demanda.